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Post y retos. Tormentita cerebral

 Eduardo A. Reyes Vargas

 

 Sin duda el triunfo del Presidente Mulino fue transparente y represento al final lo que algunas encuestas habían proyectado, a pesar  de un  descenso en porcentaje que mantenía el ex presidente Ricardo Martinelli antes de ser inhabilitado.

El Presidente Mulino al igual que cualquiera de los otros candidatos de haber triunfado se enfrenta a un problema fiscal considerable que se ha deteriorado en los últimos quinquenios y  más en este último período gubernamental.

Será sencillo cotejar gastos de quinquenios pasados  frente a presupuestos de inversiones, deudas pasadas y planilla entre otros que justifique o no  esa gran deuda de todos los panameños, pero ocasionada  por pocos.

La pandemia sin duda hizo mella, pero no fue seguida de una  política férrea de austeridad.

Para cumplir con algunas de las obras que exigen  fuerte inversión exigirán  nuevos préstamos a realizar con la  Banca internacional  incluida quizás la de  China.

El endeudamiento público muy irracional nos deja en manos de un sector privado financiero.

Pero las deudas colectivas a que somos sometido los panameños, se sienten menos hirientes, si el nuevo gobierno desarrolla de entrada  un programa severo de austeridad gubernamental.

Sabemos que estas medidas no son  populares inclusive para sectores de la empresa privada beneficiadas con compras al  gobierno.

Una verdadera política tributaria es parte de este camino  tortuoso, sugerida por organismos internacionales de crédito y la Cepal entre otros. Combate frontal a las millonarias evasiones.

Se impone la  evaluación de Instituciones creadas y con significativos  gastos de planillas, que no le han proporcionado  nada o muy poco al país desde el punto de vista de cualquier rédito y que han servido  solo para la empleomanía clientelista. Fusionando algunas y quizás desapareciendo otras.

Una racionalización en la existencia  de Embajadas y Consulados  en países que  representan intereses poco  significativos para Panamá, como la hacen naciones con más poder económico que nosotros.

Un embajador o embajadora para varios países. Ahorro de planillas, alquileres etc.

La Asamblea entrante en aparente rescate de valores democráticos deberá reformar Código Electoral en búsqueda de una  necesaria segunda vuelta, con eliminación de  esos poros no democráticos, que permiten  la asignación de curules.

Igual el derecho del votante en circuitos plurinominales a votar por personas y no necesariamente por partidos “planchezcos.”

Y muchos más.

Revisar su reglamento interno de la Asamblea que encierra privilegios, no compatible con la pobreza de millones de panameños

Revisar la utilidad o no de partidas de descentralización

Viajes  turísticos a eventos que no redundan en beneficio del país deben ser  limitados  y sí aquellos académicos que el desarrollo del país exige.

El Parlacen  otra institución que no he detectado su valor para nuestros países, salvo reuniones  protocolares, deberá evaluarse  si permanecer en ella o no. Si se decide lo último más ahorros gubernamentales.

La Asamblea entrante debe debatir su permanencia, su disminución en miembros y eliminar todo vestigio de normas que permitan la impunidad de cualquier tipo de delito.

Presidentes de Centroamericanas deben debatirlo o crear un organismo regional  de verdadera colaboración inter países.

Hablar de problemas de atención a la  salud, educación, vías de comunicación, dotación de agua y demás problemas endémicos será utopía si no hay las finanzas para solucionarlos.

Castigo ejemplar a la corrupción e impunidad comprobada.

Revisar ante todo las grandes inversiones realizadas s en últimos años

Una Fiscalía especial para esas investigaciones podía rescatar dineros que la ayudarían a su propia autogestión.

Iniciar  con una imagen de austeridad gubernamental es un buen mensaje para el pueblo sacrificado.

Algunos privilegios de Diputados e inclusive Ministros deben ser eliminados.

Quien desee trabajar por un país en crisis fiscal, no puede estar exigiendo salarios que humillan a muchos panameños en pobreza.

Si no es así , quédense en casa o en sus empresas.

En lo personal como ex viceministro de salud e Internista de profesión, con una experiencia adquirida estoy dispuesto a colaborar ad honoren, en trabajo de asesoría a cualquier servidor público de alta gestión  que lo desee, y que por razones de mi práctica médica podría más ser útil  a través de la modalidad de  trabajo en casa.

Tratándose de un gobierno orientado a la empresa privada ante todo, debe también nuestro gobierno entrante  hacer cumplir las leyes que castigan con severidad  los malos servicios privados en especial el relacionado al tema de electricidad.

No podemos pagar planilla a instituciones que no han demostrado estar del lado de la población que es víctima en todo sentido.

La empres privada debe hacer mayor esfuerzo para que el recurso humano que nos atiende en diferente actividades diarias sea un personal cortes y conocedor de la materia.

En el sector publico ni se diga,  en especial en lo relacionado a atención a la enfermedad. El monstruo de la deshumanización y desdén crece cada día.

Es el momento de cambiar el rumbo del país como sociedad unida  y en el marco de un contrato social necesario en todos  los  escenarios donde se amerite.

A renacer de las cenizas o seguir ardiendo.

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