El Periódico de Panamá Revista de Análisis Político, Económico, Social y Cultural.
Victoriano Rodríguez Santos
Tremendo tira, encoge y recoge, en la Asamblea, por la ratificación de Dino Mon como director de la Caja de Seguro Social (CSS).
Al parecer al igual que los chiquillos que nos tiramos a la calle aquel enero de 1964, contra la soldadesca gringa (hoy rebasamos los 75 años), ahora, desde otra trinchera jóvenes se lanzan al ruedo en una Asamblea (aún desprestigiada), contra la locomotora de gobierno.
Valoramos esa valía de la chiquillada en defensa de su Patria, contra propios o extraños. La dignidad no se mitiga ni se recoge, es un actuar que nos impulsa a la lucha a favor de la población.
Exaltamos a aquellos chiquillos que (entre 13 y 18 años) defendieron la soberanía, cuando el tratado Hay Buneau Varilla tenía 64 años de existencia, quizás 50 años antes del nacimiento de los chiquillos que protestaban.
Fue una juventud pensante, opuesta directa y categóricamente a arbitrariedades en la Zona del Canal. Igual, ahora 20 jóvenes diputados se opusieron a la ratificación de Dino Mon como director de la CSS, tienen olfato de pueblo.
La Constitución numera tres órganos del Estado que deberían trabajar independientes, pero en colaboración, con plena separación de los poderes entre uno y los otros.
Tengamos presente que el Órgano Legislativo, sufrió un revés espantoso en las últimas elecciones, producto de su actuar de sus diputados, espaldas al pueblo.
Los partidos políticos no solamente perdieron poderosos cabecillas o mandantes. La población equivocadamente creyó en que la juventud militante de esos partidos políticos harían diferencia de los viejos tentáculos.
El pueblo volvió a equivocarse. Desdichadamente los jóvenes diputados de partidos, responden a líneas o dinosaurios políticos existentes.
Recordemos que quienes murieron el 9 de enero de 1964, cuando luchamos por la reversión del Canal de Panamá, fueron exactamente eso, «chiquillos» que no llegaban a 21 años.
Fueron esos jóvenes quienes ofrendaron su vida por la conquista del principal recurso de la República del cual hoy gozan quienes políticamente nacieron posterior a esa fecha o cuyos padres se oponían a la reversión del Canal. Canal que debe subvencionar con aportes millonarios directos al programa de Invalidez, Vejez y Muerte (IVM) de la CSS, por lo menos con 500 millones de dólares anuales. Dios te salve, Panamá.
Economista, educador, humanista.
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