El Periódico de Panamá Revista de Análisis Político, Económico, Social y Cultural.
Por Aida Torres
Socióloga y Presidenta de ACAC
La Bandera Nacional en el Cerro Ancón
Este 1 de octubre de 2022 conmemoramos aquel glorioso día en que entramos a la zona del canal, realización de la lucha que por generaciones llevo adelante el pueblo panameño, para recuperar, el canal y su territorio junto con 36,000 millones de bienes patrimoniales.La asociación de comunidades del área del canal (ACAC), hace un balance y revisión sobre la actualidad del territorio recuperado, la antes zona del canal. Este 1 de octubre reunidos en asamblea, los moradores de las áreas canaleras, nos convocamos para revisar el Plan de Desarrollo de la Región Interoceánica territorio que comprende áreas revertidas de las ciudades de Panamá y Colon.
El Plan de desarrollo es el instrumento que regula el desarrollo y ordenamiento de las áreas revertidas, en él contempla, los usos de suelo en toda el área, y éste a su vez, debe ser garantía para la conservación ambiental y ecológica que, garantice la calidad y cantidad de agua del canal, para consumo humano y movimientos de naves. El ordenamiento del territorio fue planificado para evitar el desastre urbano, el colapso de infraestructuras sanitarias, la depredación de zonas boscosas, inundaciones, en fin, para evitar el caos que viven las ciudades sin planificación y garantizar en las áreas aledañas al canal, condiciones favorables a la sostenibilidad del mismo.
Hoy a 43 años de que entramos a la zona del canal, el Plan de desarrollo de las Áreas revertidas, ha sido ignorado por quienes les fue otorgado la responsabilidad de administrar y garantizar una región planificada, o sea, hacer cumplir la ley 21 de julio de 1997, ley que hace de obligatorio cumplimiento el Plan. Instituciones, principalmente ARI, hoy MEF (UABR) directores de estas instituciones, gobiernos locales (junta comunal y municipio) aprueban permisos que violentan el orden, ignoran la ley, dan visto buenos y permisos para dar otro uso (usos distintos), a los usos de suelo establecidos en la ley, colaboran en una ausencia de institucionalidad y de irresponsabilidad con la seguridad jurídica. Tal violación va imponiendo por parte de las autoridades otro orden antijurídico, en el cual se nos va la planificación por los destinos más caóticos, para las áreas del canal; y es que, los gobiernos que han transcurrido desde aquella memorable fecha de entrada a la zona del canal, están compuestos por quienes consideran la planificación y el ordenamiento territorial y los usos de suelo, como un obstáculo a sus apetitos voraces de concentración de riquezas y a su insaciable avaricia.
Hoy en esta asamblea con la representación de las diferentes comunidades del área revertida, atlántico y pacífico, se ha confirmado en cada comunidad, el proceso de desmantelamiento de la planificación, trabajo y consenso nacional que fue el producto de consultorías científicas para ordenar el territorio recuperado, este que llega a ser y es hoy el único territorio organizado en una ley, (ley 21 de julio de 1997). Se va desmantelando una planificación que nos costó a todos 9.3 millones, para preservar en bien del desarrollo nacional, el valioso patrimonio que se recuperó con sangre y pérdida de vidas, que lucharon bajo un imaginario del mayor uso colectivo posible, que vemos hoy como el mayor despojo.
La Asociación de Comunidades del Área del Canal (ACAC), consciente de la realidad se ha mantenido y se mantiene en pie de lucha, contra el despojo y exige el respeto a plan y la remoción de toda violación del uso de suelo, en nombre de esa DEMOCRACIA Y SEGURIDAD JURIDICA, tan invocada y cacareada por algunos, que hacen de las tierras revertidas un botín inmerecido.
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