El domingo pasado, 5 de diciembre, se organizó una junta para cortar arroz en Darién, donde hermanos cristianos se dedicaron a cosechar arroz sembrado a chuzo, cuyo desarrollo es excelente como se puede observar en los distintos videos que, además, rememoran las costumbres ancestrales de nuestros campesinos en donde se juntaban todos a recoger la cosecha, secar el arroz y empilarlo en formas características.
La alegría de unos setenta hermanos, lograron cosechar cientos de quintales de arroz, mismo que llega en un momento en donde Enel mundo se advierte una escases de alimentos que estos panameños trabajadores no pasarán por esa angustia porque supieron actuar con una alta cuota de previsión.
Mientras los varones cosechaban, las mujeres preparaban las viandas que después se compartieron, dándole Gracias a Dios por la cosecha y por librarnos del hambre y la carestía.
Estas costumbres hermosas no deben morir, porque la llevamos muy dentro del alma y son parte de nuestra identidad de hombres y mujeres trabajadores que aspiramos a un país digno.
Así de sencilla es la cosa
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