Victoriano Rodríguez Santos
Impresionante. Al parecer hay mucho temor. La población ni los pacientes de la Caja de Seguro Social (CSS), inclusive los de cáncer, reaccionan ante tantas inexactitudes de quienes gobiernan.
Ahora, la mesa de trabajo pretender hacerla en anonimato. Nada de medios de comunicación. Peligroso, pueblo panameño.
Para “salvar a la CSS” no hay que esconderse de los medios, por el contrario, todas las participaciones deben intervenciones ser públicas, para conocer quienes quieren contrariar la CSS y quienes la defienden. La pasividad tiene límites, prueba fue la lucha contra la minería.
Todo parece indicar que tal y cual se perfila, huele a velorio. ¿El difunto? Los cotizantes de la CSS, porque sobre nuestros hombros recostará el gobierno el sistema de salud, o no? De hecho, ya estamos cargando los beneficiarios, sin que el gobierno aporte por ellos.
Los jubilados o pensionados estamos esperando. Quizás nos llegue la «pelona» antes que hacernos justicia. Así de fácil la tenemos y no queremos verla. ¿Por qué esperar hasta la última hora? Seremos victimas de nuestro poco importa y obviamente los fracasos.
Mientras la población no se quiera defender, estamos en total desamparo. De no hacer nada, a quien acudir después para defender nuestros derechos? Señores policías, ustedes son parte de la población y tanto ustedes como sus parientes sufrirán las mismas consecuencia que los civiles, la prueba, los policías jubilados.
Tal como en la pandemia, el Ministerio de Salud y el gobierno nos crearon tanto miedo que aún se refleja en nuestro actuar. Finalmente aun quedan secuelas que no quieren reconocer de esa vacuna experimental. Lo cierto es que parecieran existir mas enfermedades raras y muertes repentinas que antes de la plandemia.
Es la hora de exigir un mejor sistema de salud, pero no unificado. Unificarlo sería recostar mucho mas la responsabilidad que constitucionalmente corresponde al Gobierno, a través del Ministerio de Salud, a la CSS.
Presidente MULINO. es necesario reforzar sus pantalones, como lo expusiera en sus poemas el coterráneo Santiago Anguizola Delgado (QDEP): «De junquillo flexible mi sombrero,//camisa holgada de cotín listado,//pantalones de dril fuerte y tostado,//grueso calzado y cinturón de cuero.»
Para solucionar los problemas del País NO TIENE QUE SER DICTADOR. tiene que perseguir «CON PASO FIRME» a quienes se han apropiado de los recursos del Estado y de la CSS lo devuelvan (bajo cualquier método) y meterlos preso, aún cuando fueren sus amigos o copartidarios. Dios te salve, Panamá.
Economista, educador, humanista.
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