Por: Eduardo A. Reyes Vargas
En definitiva los concursos por méritos pretenden fortalecer el capital humano de cualquiera organización, pública o privada.
“La finalidad del proceso es garantizar que el aspirante seleccionado para cada vacante sea aquel que acreditó en las distintas etapas y pruebas poseer experiencia laboral y académica, al igual que el dominio de competencias y habilidades suficientes para desarrollar sus funciones de la mejor manera.
-El concurso de méritos se construye a partir de los siguientes principios: mérito, libre concurrencia, igualdad para el ingreso, publicidad, garantía de imparcialidad, confiabilidad, eficacia y eficiencia.” Párrafo de un sitio visitado.
En mis 75 años de existencia y 50 dentro del sector salud, he sido testigo de estos concursos
Si los mismos han fortalecido a nuestras instituciones dedicadas a garantizar la salud y el cuidado de la enfermedad, no lo sé.
Así como se realizan en el sector salud, también el sector educativo los realiza desde años atrás.
Su impacto positivo, también lo tengo en duda.
Recientemente se produce un escándalo en lo relativo a vacantes de educadores, señalándose quizás la existencia de diplomas falsos.
Definitivamente en todos los sectores públicos y privados es importante realizarlo por lo expresado en párrafos anteriores.
Pero hay sectores más sensibles que otros. Para mí lo son salud, educación, justicia y seguridad.
Con algunas tendencias de algunos ciudadanos de practicar el síndrome del impostor y falsear documentos, creo que las evaluaciones de acuerdo al puesto y sus responsabilidades inherentes, sometido a concurso ,deben ser más estrictos.
Y no solo evaluar las famosas competencias académicas sino las transversales.
Los concursos exitosos exigen, convocatoria y divulgación, derechos de participación, aplicaciones de pruebas y evaluaciones objetivas e imparciales con matriz de puntajes preferiblemente homologados, y si es posible informaciones de seguridad en torno a desempeños del concursante en instituciones previas.
Esto último para evitar ingreso de maleantes a puestos de importancia y responsabilidades.
Hoy con las múltiples universidades que existen en Panamá, certificadas algunas y otras no, los títulos y créditos, deben ponderarse de acuerdo al origen del ente Universitario donde se produjo el aprendizaje.
No es lo mismo un egresado de una Universidad de “Cucurucha”, que otra de conocido prestigio nacional o internacional.
Perfeccionando ese tamiz con nano orificios, será quizás posible fortalecernos como País en esa materia.
1 Hay un solo Like:(“No importa poco cuántos cursos universitarios o títulos posea una persona. Si no puede usar palabras para mover una idea de un punto a otro, su educación es incompleta.” Norman Cousin.