De contradicciones e insensateces. A propósito del covid 19.|  

Por:Ramiro Guerra Morales, Abogado y Cientista Político.   

Pedimos rigurosidad en el cumplimiento de las medidas de bioseguridad, pero simultáneamente, tanto autoridades como empresarios, promueven concentraciones y multitudes, donde imposible guardar distancia. Se suele hablar y escribir, de falta de disciplina del pueblo, ¿pero de qué pueblo se habla y escribe?

De uno con cálculo desorganizado; ideológicamente trabajado en el consumismo y casi nada sentido de solidaridad. En una realidad donde, los mensajes son contradictorios y a veces, destaca la incoherencia.

En muchos centros de concurrencias de gente, hasta el alcohol ha sido eliminado, no se guarda la distancia y la mascarilla por debajo de la nariz. Cuando se les llama la atención, te responden, yo tengo la vacuna y los refuerzos. Los entiendo; inicialmente subliminalmente ese fue el mensaje que se envió.

¿En qué quedaron los comités de bioseguridad en las empresas? ¿qué autoridad le dio seguimiento?   En este escenario, los aumentos de contagiados, no debe ser una sorpresa.   ¿dónde está o hubo la falla?  En el cómo conciliar economía y salud de la población. La estrategia de las vacunaciones masivas, ha resultado insuficiente.   ¿Por quién corre esta responsabilidad? ¿El pueblo? ¿Pero cómo generar conciencia, en un escenario de ausencia plena de la organización por las bases, por la comunidad?    Mucho cuidado con esa posición, de culpar a los no vacunados, de los incrementos de contagiados. Es un argumento para manipular y ocultar la falta de transparencia y enfoques equivocados del manejo de la pandemia.

En una ocasión, escribí, que notaba la ausencia de profesionales en lo relativo al manejo psicológico de masas.  Había un vacío y evidentemente los mensajes elaborados, por este desconocimiento caían en el vacío.

Panameño, usa tu mascarilla, pantalla facial y guarda la distancia. Que no falte el alcohol en tu bolsillo o cartera.

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