Por: Rekha Chandiramani y José Dídimo Escobar Samaniego (Especial para El Periódico de Panamá.com)
La Caja de Seguro Social admitió en la tarde de ayer la sustracción de miles de dosis de fentanilo de la entidad, información que reveló El Periódico por primera vez. Seguidamente, la Procuraduría emitió un comunicado anunciando la investigación del hecho.
Pero este medio pudo conocer más detalles sobre la denuncia. De acuerdo a una fuente con conocimiento del hecho, las dosis de fentanilo robadas sumarían al menos 19,000. El fentanilo es un anestésico opioide de uso hospitalario, cuya concentración en ampollas es de 0.05mg y de 10ml para intravenosas (I.V.). Este medicamento está catalogado para ser prescrito en “recetas amarillas”, lo que indica que está controlado como un narcótico, y entre sus efectos adversos están la depresión respiratoria, reacciones locales como salpullidos, eritema, prurito, entre otros.
Las ampollas desaparecieron de los almacenes de las farmacias de la Caja de Seguro Social a finales de noviembre, luego de haber sido entregadas por los suplidores, según la fuente, pero no es hasta esta semana –cuatro meses después de ocurrido- que la entidad habría comunicado del hecho al Órgano Ejecutivo.
La dirección de la entidad manejó el caso con hermetismo. Incluso la investigación que abrió el Ministerio Público –también cuatro meses después de haberse dado la supuesta sustracción- para el caso fue declarada como de extrema reserva, lo cual impide el acceso a dicha información por parte de los asegurados, los medios y la ciudadanía en general, que son los que sostienen con sus aportes el sistema de seguridad social.
También se conoció preliminarmente que los encargados de los departamentos donde se dieron los hechos, incluyendo médicos tratantes, fueron trasladados a la Ciudad Hospitalaria.
En 2021 entraron al país más de un millón de ampollas de fentanilo importadas por la empresa Nutrimed Panamá, en tres embarques diferentes, cuyo valor total se cifró en 281,742 dólares según registros aduaneros. De acuerdo al costo reportado, cada vial costó menos de 30 centavos a la empresa importadora. No se tiene registro del costo de venta a la entidad ni relación contractual de que haya sido esta empresa la que vendió el producto a la CSS, pero según los registros aduaneros, es la única que importó fentanilo en ampollas en grandes cantidades en los dos últimos años.
De acuerdo a la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito, el fentanilo de uso farmacéutico puede venderse en las calles desde unos 300 dólares por gramo, mientras que en Estados Unidos cada pastilla de fentanilo puede costar unos 60 dólares en las calles.
De acuerdo al Centro para las Adicciones de Estados Unidos, el fentanilo es de 50 a 100 más potente que la morfina, y se utiliza para aliviar el dolor poscirugía o en el tratamientos contra el cáncer u otras enfermedades crónicas con alta carga de dolor. El fentanilo bloquea los receptores del dolor produciendo un efecto similar al de la heroína. Tiene, además, un alto grado de peligro de sobredosis especialmente en personas con poca o nula tolerancia a opioides.
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