Por: David Carrasco
Director de Bayano digital
El Canal de Panamá ha firmado un contrato con el Cuerpo de Ingenieros del Ejército de Estados Unidos (USACE, por sus siglas en inglés), dirigido a proveer servicios de consultoría y asesoría técnica para el Programa de Proyectos Hídricos, en momentos en que tropas estadounidenses salen de Irak y Afganistán.
Ese hecho fue destacado en gruesos titulares por la revista informativa El Faro, de la ACP, cuyos integrantes no se detuvieron a examinar las implicaciones de volver a vincular a la vía interoceánica con una fuerza militar extranjera desmantelada a partir de la ejecución de los Tratados del Canal “Torrijos-Carter”, de 1977.La nota de prensa evita toda alusión a los principios soberanos. En cambio, indica que el objetivo del convenio, concretado el 18 de noviembre, es “lograr un sistema optimizado de administración de agua, enfocado en abastecer de este recurso a la población y a la vía acuática”.
Para justificar ese acto contractual, se señala que USACE ofrece asistencia técnica en más de 100 países del mundo, como el mantenimiento de más de 700 presas, 24.000 kilómetros de diques, 21.000 kilómetros de puertos y canales, y 240 esclusas en Estados Unidos.
En junio pasado, el Canal reformuló el modelo de licitación para la construcción y ejecución del sistema optimizado de administración de agua, en atención a las sugerencias presentadas por las empresas interesadas durante el proceso de precalificación. Y, precisamente, esa adjudicación va más allá de los aspectos económicos, al desconocer aspectos de la neutralidad panameña y la seguridad.
Es necesario recordar que el Canal de Panamá y la USACE firmaron en 2019 un acuerdo de cooperación y asistencia técnica para el desarrollo de servicios de ingeniería, sostenibilidad ambiental, operación, reducción de daños por desastres, y análisis de riesgo de la gestión integrada de los recursos hídricos, entre otras actividades. ¿Acaso no significa ello darle paso expedito a una fuerza militar extranjera en la vía acuática regida por principios de neutralidad permanente?
El administrador de la ACP, Ricaurte Vásquez, y los integrantes de la Junta Directiva de la empresa canalera parecen haber echado a un lado el sacrificio de decenas de panameños que pagaron con su sangre y su vida la recuperación del Canal y la eliminación de la quinta frontera y el complejo bélico en su territorio.
Los herederos de las gestas soberanas en este país tienen la obligación de defender con coraje el mandato de los mártires de enero de 1964 e impedir que el principal recurso estratégico de Panamá pase al control de fuerzas militares extranjeras, aunque ello implique derramar sangre.
(Tomado de Bayano Digital)
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