El concepto de crisis y sus efectos.|

Por: Ramiro Guerra M.  Abogado y Cientista Político.      

La crisis, pueden trascender en la conciencia de los pueblos, generando un estado de animosidad, que predispone a lo contestatario y a la movilización. Dicho de otra manera, la realidad objetiva, trasciende a lo subjetivo, colectivo. Algunas veces este proceso, surge como espontáneo y poco o cero organización.   Otras veces, la crisis, tienen un efecto negativo, en el sentido que, genera una especie de amorfismo social, desánimo de lucha; una especie de marcada ideología lesseferista; dejar hacer y dejar pasar.

La crítica social, no tiene la fuerza de prender en la conciencia de tal suerte que mueva a la acción de masas, generando con ello un polo de poder que incida en los asuntos y al cómo se debe conducir la gobernabilidad de un estado. Aquí reside una real oposición. Se dice en política que, el mejor aliado de un gobierno, es la poca o casi nula disposición colectiva de un pueblo.

Estos movimientos o procesos, contradictorios entre realidad objetiva y su tránsito hacia lo subjetivo colectivo, suelen mantenerse en un estado de reposo. De movimiento lento de la contradicción, lo que no siempre será así; los desenlaces o mejor dicho, la acumulación de episodios cuantitativos, más temprano que tarde, evolucionan hacia saltos de calidad.

En la historia, los movimientos que han inducido cambios trascendentales en la humanidad y en cualquier sociedad, lo inician minorías. Un solo hombre, con doce apóstoles, cambiaron la historia. Lenin y los bolcheviques, otro ejemplo de lo que un pensamiento crítico hacia la acción puede hacer, aunque siendo minoría a su inicio.

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