Por: Ramiro Guerra Morales
Este escrito lo publicó el periódico el 17 de octubre pasado. Hoy el pueblo argentino votó por Melei, aún cuando hay evidencias sólidas de que no está estable en el piso superior.
Algunos expertos tratan de explicar las razones que han llevado al pueblo a adoptar la decisión que han expresado hoy y las consecuencias que de ello se deriva para ese país.
Allá, como como acá, la gente está frustrada y cabreada y llegan a veces a votar hasta por un desajustado mental, porque la clase política ha fracasado estrepitosamente ante un pueblo que desea rescatar la posibilidad de tener la oportunidad de reconstruir al país después que la corrupción ha destruido la paz pública y ha condenado a la miseria a millones de personas y los que han robado se regodean de sus riquezas mal habidas y se burlan de nuestra gente.
Es un tema complejo por descifrar. Una especie de enigma. ¿Quién es Javier Melei? Candidato a la presidencia de la Argentina y marca de primero para ganar. Veamos lo que dice y propone:
- Eliminar el banco central y dolarizar la economía, en momentos que el dólar viene perdiendo valor.
- Eliminar los subsidios a las empresas de servicios públicos y que el usuario cargue con el costo real de tales servicios.
Es como si en Panamá se eliminara el subsidio al tanque de gas de 25 libras. Entonces el usuario tendría que pagar entre 18 a 20 balboas, porque el gas es un oligopolio de dos empresas con super utilidades a costa del pueblo.
- Eliminar el Ministerio de Salud, Educación y crear un ministerio del Capital Humano;
- Legalizar la venta de órganos humanos;
- Venta libre y sin restricción de armas;
- Prohibir la enseñanza de educación sexual;
- Eliminar la educación gratuita;
- Liberar toda la economía y …
- Vender activos del estado.
- En su campaña ha dicho que el Papa Francisco es el representante del diablo en la tierra y que es un comunista.
- Plantea eliminar el Ministerio de la Mujer. Es un misógino que raya en el odio a las mujeres.
A pesar de todas estas irracionalidades, marca como el posible ganador de las próximas elecciones que se realizarán el 22 de octubre.
¿Cómo se explica este fenómeno? ¿Acaso una especie de enajenación colectiva donde el pensar ha sido purgado de la conciencia de los votantes? ¿Puede ser un efecto de las maquinarias mediáticas que ostentan los grupos de poder económicos? ¿O el malestar social acumulado por «más de lo mismo», que hace que a los votantes no les importe quien gane? ¿También podría ser una combinación de todas estas variables?
En el caso panameño, una juventud atrapada por cuestiones baladíes que trajo la tecnología de la comunicación y que lleva a una ruptura con la real realidad?
Los movimientos y opciones progresistas y de izquierda, tienen que ponderar estos fenómenos. ¿En qué se está fallando en cuanto a comunicación de masas?
Queda abierto el debate.
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