Licenciado Raúl J. Ossa DLC.
Abogado y activista social.
Mi conciencia de panameño se esmera en felicitar a los docentes de mi país, a los pueblos originarios, a los sindicatos, a SUNTRACS, CONUSI, etc. y a todos los panameños que estamos luchando en la calle y en los micrófonos y que paso a paso, grito a grito, a punta de biombazos y pedradas, hemos ido configurando lo que hoy comienza a perfilarse como un triunfo estruendoso del movimiento popular panameño. Todavía no terminamos, ya vamos apenas por la mitad de la tarea y nos falta una parte igualmente difícil, pero lo logrado hasta hoy ya es digno de celebrarse y de registrarse en nuestra historia como un elocuente ejemplo de lo que la unión de un pueblo decidido es capaz de hacer por sí mismo.
- Este movimiento social se inició con el inmenso enojo del pueblo panameño sobre todo contra los últimos gobiernos que han permitido, promovido, practicado, tolerado y han callado el latrocinio y la corrupción; contra el alto precio del combustible, de los alimentos, de los medicamentos y contra la burla de los aumentos de gastos de representación y de los lujos insultantes como lo hacen los diputados libando Macallan…
- Uno de los primeros sectores populares que protestó fue el de los transportistas, quienes declararon un paro y el gobierno les concedió la rebaja a tres 95 únicamente a ellos. Se dieron por bien servidos y no exigieron dicho beneficio para la totalidad del pueblo;
- El segundo sector en protestar fue el sector agropecuario que, justificadamente luchó cerrando las calles con sus tractores y el gobierno los incluyó y les concedió ciertos beneficios únicamente para ese sector;
- Entonces apareció el movimiento de los educadores de la mano de AEVE en Santiago y los hermanos originarios Ngobe en Chiriquí, exigiendo la rebaja del combustible, de la canasta de alimentos y de los medicamentos, no solamente para ellos sino para beneficio de todo el pueblo. Lógicamente este giro de exigir para beneficio de todo el pueblo conquistó la simpatía popular y el pueblo se le fue uniendo hasta convertir la causa en un fenómeno social, político y económico de magnitudes históricas que requeriría a la postre, de mentalidad de estadistas consumados para obtener solución.
- Mientras esto ocurría, el Presidente de la República guardaba actitud furtiva, mutismo, no aparecía en el escenario público dando la impresión de que el nuestro era una país anárquico, sin visión, autoridad ni liderazgo;
- Se consolidó firmemente la unidad y la fortaleza del movimiento popular con la integración de los sindicatos, padres de familia, abogados, algunos comunicadores sociales, médicos, enfermeras, transportistas y pueblo en general, que se organizó en tres grupos: Bastión de lucha de los pueblos originarios, Alianza Nacional por la Defensa de los Pueblos Organizados (ANADEPO) y Alianza Pueblo Unido por la Vida.
- La perseverancia y la determinación de grandes sectores de la población unida en la lucha con los cierre de calle, con grandes manifestaciones populares, marchas, concentraciones,, vigilias nocturnas, los sancocho, tamborito y todas esas manifestaciones obligaron al gobierno PRD a bajarse del Olimpo, a abandonar la soberbia, reconocer una crisis que amenaza su propia estabilidad y la paz nacional, por lo que acorralado se ve obligado a sentarse a dialogar con la dirigencia para tratar de encontrar una salida con el menor costo político para su gobierno y para su partido;
- El presidente reaparece y anuncia que ha ordenado reducir el 10% de la planilla del Gobierno y que promoverá la derogatoria de la Ley de privilegios a un minúsculo grupo de sus amigos que se activan en el turismo y convoca el jueves 14 de julio una mesa de diálogo en la Ciudad del Saber. Pero los sectores populares que estaban en lucha se niegan a presentarse en la ciudad del Saber y exige AEVE que la mesa se instale en Santiago de Veraguas;
- El gobierno intenta utilizar la estrategia de la confusión, dilatación, infiltración y división, para lo cual usa la táctica de implementar tres diálogos: Uno en la ciudad el Saber (Panamá) al que ningún sector popular acudió, otro en Santiago de Veraguas y otro en San Félix (Chiriquí).
- El domingo 17 de julio, en las negociaciones que se adelantan en la Mesa de Santiago, se produce y se firma rápidamente un acuerdo que consiste en bajar el precio del combustible a B/3.25 a cambio de la finalización de las protestas. Este acuerdo es rechazado por las bases docentes y por el resto de los sectores populares en pie de lucha sobre la base de que el combustible no era la única exigencia del pueblo y que si levantaban los cierres de calle y la huelga, el gobierno dilataría y debilitaría al movimiento.
- El dirigente Luis Arturo Sánchez de AEVE y ANADEPO, aceptando la validez de los argumentos que dan fundamento al rechazo de las bases, de manera material y pública, reniega del Acuerdo, desiste del mismo y rompe el papel que lo contenía. Las bases apoyan a su dirigente tras su desencuentro con el Gobierno y la lucha en las calles continúa con mayor intensidad.
- Este fue uno de los momentos más difíciles vividos por el movimiento popular en esta coyuntura, porque, tras la firma y reniegue del Acuerdo de los B/3.25, el movimiento popular queda dividido a consecuencia de la firma de finalización de cierre de calles. Los Sectores populares hacen marchas por separado con acusaciones de traición y el Gobierno parece triunfal con su estrategia “divide y vencerás”.
- No obstante, rápidamente entra en acción la diplomacia popular, la dirigencia ejercita su capacidad de diálogo, de deposición de protagonismos y de habilidad para cohesionar a la población, y el movimiento social se reconcilia, se fortalece y decide actuar juntos y unidos en UNA SOLA MESA Y UNA SOLA AGENDA.
- Así nació la mesa única de diálogo con la agenda única de diálogo, la cual se instala en terreno neutral, Penonomé. Con la mediación de la Iglesia Católica, el Gobierno nacional acorralado y presionado por la generalizada protesta y paralización del país, nombra una comisión de 6 ministros , cinco viceministros, 10 Directores de Entidades y a regañadientes acepta dialogar en mesa única con las tres alianzas de los sectores populares: El Bastión de Lucha de los Pueblos Originarios, La Alianza Nacional por la Defensa de los Pueblos Organizados (ANDEPO) y la Alianza Pueblo Unido Por la Vida.
- En esa mesa se acuerda una agenda única de ocho puntos qué son: la canasta básica, el combustible, el precio de los medicamentos, la educación, energía, Caja de Seguro Social, la corrupción y mesa sectorial y seguimiento;
- La reconciliación de las bases docentes y de todos los sectores, así como el fracaso de la estrategia de dividir, fortaleció al pueblo en lucha. La presión popular aumenta, se intensifica la lucha en las calles; se incrementan los cierres; las principales arterias del país están cerradas; el país está paralizado; se produce desabastecimiento de comida en la ciudad capital y en otras partes del país; las ambulancias no pueden circular; escasean los insumos en los hospitales, se registran graves enfrentamientos entre manifestantes y la policía. El Gobierno subestimó la capacidad de cohesión del pueblo… Panamá cayó en el caos y la crisis…!
- La reconciliación de los sectores populares y la instalación de la mesa única han consolidado la causa. Se une el pueblo y ahí comienza un rosario de triunfos: queda la gasolina B/3. 25; se reduce B/.80 en el costo de la canasta básica de alimentos y se incorporan 72 productos y finalmente se aprueban cerca de tres decenas de acuerdos en el tema de la educación y seguramente se pacta el fin de la huelga;
17, Con respecto a los medicamentos prácticamente no hubo acuerdos porque el Gobierno se ha aferrado a su papel de protector del oligopolio y de la mafia de los medicamentos, en vez de proteger primordialmente el interés de las mayorías. El Gobierno se niega específicamente a regular los márgenes de ganancia de los importadores, lo cual ha producido un gran disenso de manera que este tema todavía se mantiene abierto a la discusión y no debe abandonarse ni por cansancio ni por indiferencia ni por deliberación.
- Todos los temas en agendas son igualmente relevantes y de gran impacto en la sociedad panameña. Pero, el tema de la educación es uno de los puntos que generó una expectativa distinta por cuanto impacta de manera principal y directa a los sectores docentes que iniciaron este movimiento y por cuanto se mantiene una huelga docente que ha privado gravemente a la infancia y a la juventud de recibir sus conocimiento, circunstancia que mortifica y quita el sueño a los que luchamos y a los que no luchan.
- Cerca de la medianoche del sábado 30 de julio se lograron en la Mesa del Diálogo importantes avances. Se alcanzaron cerca de tres decenas de puntos sin disensos; lograron alrededor de 29 consensos, cero disenso. El más importante de los Acuerdos conquistados es que se aprobó asignar 5.5% del Producto Interno Bruto a la educación panameña en el Presupuesto General del Estado en el año 2023 y 6 por ciento en el 2024. Este Acuerdo también incluye el fin de la huelga docente sujeta a la consulta y ratificación previa por parte de las bases de los maestros y profesores.
- Esa noche la facilitadora del diálogo, que es la Iglesia Católica en su más alta representación -Monseñor Ulloa- decretó un receso hasta el miércoles 3 de agosto con el fin de dar el espacio para que los docentes consulten a las bases y levanten la huelga si así las bases lo deciden y concluyó la sesión con una oración y un emotivo canto conjunto del Himno al Maestro y del Himno Nacional de Panamá;
El miércoles 3 de agosto se reanudará el diálogo con el fin de tocar los temas restantes que son igualmente importantes y difíciles como energía, Caja de Seguro Social, CORRUPCIÓN y asuntos sectoriales y seguimiento.
EL VALOR DE LO ACONTECIDO HASTA AQUÍ…
Hasta aquí el éxito del movimiento popular en las calles y en la mesa ha sido indiscutible y relativo, pero muy significativo. El pueblo panameño, al menos los sectores comprometidos en la lucha social hemos obtenido grandes logros en beneficio de todo el pueblo panameño: Antes de la lucha comprábamos el combustible a B/6.00; ahora, porque luchamos, lo podemos comprar a B/3,25. Hemos logrado una rebaja de B/.80 en la canasta básica, y también conquistamos el 5.5% para educación en 2023 y 6% en 2024. Todavía nos queda el reto de insistir con bravura en el tema precio de medicamentos;
EN LA MESA NEGOCIANDO Y EN LA CALLE LUCHANDO, RECETA INFALIBLE …!
Ha sido de indispensable utilidad la estrategia de reconciliación, de consulta a las bases y sobre todo haberse sentado a dialogar al mismo tiempo que mantener la intensidad en la lucha de calle, lo cual ha presionado al Gobierno para que variara su estrategia de dilación y tolerara que el movimiento popular, con técnica de dentista, le extrajese las conquistas reclamadas y hasta hoy alcanzadas.
HEMOS AVANZADO, LA LUCHA CONTINÚA. SUSPENSIÓN CONDICIONAL DE LA HUELGA
Ahora toca volver a clases, previa aprobación de las bases e inmediatamente, victoriosos, con un gran trofeo y legado para todo el pueblo panameño: el nuevo precio del combustible aunque sea temporal; la rebaja de la canasta básica y el 5.5% para educación. Pero hay que volver a clases advirtiendo claramente que el movimiento popular se mantiene alerta y dispuesto a volver a cerrar calles y a declararse en huelga ante el más mínimo indicio de que el gobierno pretenda dilatar o evadir la discusión de los siguientes temas, especialmente sobre el tema de la CORRUPCIÓN y sobre la caja de seguro social. Hay que suspender condicionalmente la huelga con el regocijo que da la victoria, con alegría, prudencia, cautela y mucha militancia, porque el movimiento popular no puede marearse, debilitarse ni descuidarse porque hay que seguir esta lucha hasta completar la agenda única de la mesa única agotando los ocho puntos.
SE HA FORTALECIDO EL MOVIMIENTO POPULAR
No hay la menor duda de que en esta gesta histórica se ha fortalecido el movimiento popular. Ha sido tan efectivo que en un mes de lucha de un pueblo unido hemos conseguido cosas que la Asamblea Nacional no ha podido conseguir en 20 años. Quizás, hiperbólicamente pensando, se nos cruce por la mente la idea de eliminar esa Asamblea Nacional corrupta, exageradamente costosa e improductiva e instituir en su lugar una mesa de diálogo integrada por el movimiento popular. Aquí está la prueba de que en la unidad hay victoria y deberíamos convencernos de que debemos proceder unidos siempre y con determinación para obtener la conquista que el pueblo está demandando: acabar con la corrupción es la base del ideal político y moral de nuestros días. Pero unidos todos barriendo a los corruptos, sanitizando al Estado en sus tres órganos y también combatiendo la corrupción de los gobiernos locales.
GESTA DE CATEGORÍA HISTÓRICA Y PATRIÓTICA
Si como pueblo y ciudadanos conscientes mantenemos la militancia, la determinación, la confianza en nosotros mismos y la unidad de conciencia y de acción, tengan la seguridad de que en este momento el pueblo panameño UNIDO está escribiendo otra página de categoría histórica y de gran categoría patriótica como fue la gesta del 47 con el rechazo al Tratado Filos-Hines; como fue la del 58 con el Pacto de la Colina; como fue la gesta soberana de 1964 con los mártires de enero y como fue la recuperación de la democracia de la mano de la Cruzada Civilista y algunos partidos políticos.
Definitivamente, un pueblo unido jamás será vencido…!!! Habla, Pueblo..! Habla…!!!
La Chorrera, 30 de julio de 2022.
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