El Periódico de Panamá Revista de Análisis Político, Económico, Social y Cultural.
Por Ramiro Guerra M. Abogado, escritor y cientista político.
La gente de antes, nuestros abuelos, solían decirnos, todo el mal que hagas, mas temprano que tarde, te pasa factura.
Ese pacto, de que un nuevo gobierno, no investiga al que le precedió, expone grados de ruptura.
El gobierno de Laurentino Cortizo Cohen, muchos de sus funcionarios de alto nivel, seguramente la ciudadanía los verá subiendo las escaleras del ministerio público, incluyendo al actual procurador general del país.
No por casualidad , el gobierno en materia de transparencia, marca negativo.
Solamente el affaire del ignominioso contrato firmado con First Quantum, dio cuenta de graves violaciones al código penal. Tanto los dignatarios de esta empresa como el gobierno, empezando por el presidente, tendrán que aclarar y explicar al pueblo y a la justicia, muchas de sus actuaciones.
El tema de Rendición de cuentas, estará a la orden del día. El gobierno ha administrado mucho dinero y de justicia es, que el pueblo sepa el destino de esos dineros.
El nuevo gobierno, auscultado el manejo de las finanzas, no puede actuar timorato.
Hay que parar, eso de que aquí no pasado nada.
Cierto, la corrupción constituye algo trágico, pero peor la impunidad.
La ciudadanía tiene que estar alerta frente a esa práctica, de un presidente entrante, no investiga al saliente. Sobran ejemplos en Latinoamérica, que esa perversión está cambiando.
No es un invento, hay funcionarios a todos los niveles, cuyo salarios no dan como para exponer o hacer alarde de riquezas.
Soy del criterio, que existiendo indicio de prácticas delictivas, la justicia tiene que garantizar la devolución de lo mal habido.
Los delincuentes de cuello blanco, los traidores a la patria, los que se apropiaron en contubernio con las autoridades, bienes de la nación, tienen que ser sumariado y que, en estos casos su majestad la pena reine.
¡AHORA O NUNCA!
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