El Periódico de Panamá Revista de Análisis Político, Económico, Social y Cultural.
Por Ramiro Guerra M.
Abogado, escritor y cientista político.
Justo reconocer, la transparencia del gobierno, al adelantar lo que pudiera ser su propuesta de ley, para enfrentar la crisis de la Caja de Seguro Social y en especial el programa de IVM. (Invalidez, vejez y muerte).
Veamos lo que ha adelantado el gobierno y su ministro Felipe Chapman.
- El estado tendrá que hacer aportes en recursos financieros;
- La población, igual tendrá que poner su cuota de sacrificio.
Lo anterior dará lugar a un programa de choque, en tanto que afectará a sectores medios y populares de la sociedad.
El gobierno apunta a: eliminación de subsidios, al combustible, al tanque de gas de 25 libras. En esto último, el gobierno sostiene que este subsidio beneficia a una minoría de la población; también explora la eliminación al subsidio a los productores de arroz, argumentando que estos, su rentabilidad ha sido positiva.
Seguramente, el paquete es más abarcador.
Las anunciadas por el ministro Chapman, tendrán un fuerte impacto en la población. También el gobierno y el ministro, han sido categórico, al señalar medidas paramétricas, como el aumento de la edad, de los porcentajes que se aportan en concepto de cuotas y aumentos de la cantidad de cuotas.
De lo anterior se colige, que la mayor carga del cómo enfrentar la crisis, la llevarán los sectores laborales del país.
El gobierno ha señalado, que no reparará en el costo político, que se deriven de su propuesta, lo que seguramente abrirá un compás de niveles de confrontación.
Algunas de las medidas anunciadas, tendrá incidencia negativa en los ingresos salariales de los trabajadores y sectores medios de la sociedad.
Somos del criterio, que el estado, si puede disponer de recursos financieros para la caja de seguro social, sin necesidad de golpear a la población y contribuyentes, sobre todo a los sectores populares. (ver y analizar la propuesta del movimiento sindical).
La eliminación del subsidio de combustible, se constituirá en un duro golpe al bolsillo de los contribuyentes.
Se repite la historia, el pueblo paga los platos rotos. Y el poder económico, se hecha fresco.
Ahora bien, albergamos la esperanza, que el gobierno haga conciencia, que las propuestas que ha hecho pública, puedan ser objetos de replanteos, de tal suerte, que el proyecto que se enviará a la asamblea, lleve el sello de los consensos necesarios, de tal suerte, que la cuestión, no se traduzca en confrontaciones.
Somos del criterio, que algunas medidas, no necesariamente de agrado por los trabajadores y medios, pudieran repensarse, a condición de que volvamos por la senda única de la solidaridad. Este paso, implicará una fuerte inyección financiera del sistema mixto, que debe desaparecer.
El objetivo, lograr que los panameños, se retiren con un ingreso salarial por arriba del 60 por ciento.
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