por Ramiro Guerra M.
En algún momento pensé que el actual gobierno, daría un giro de timón a la forma de ejercer el poder y dirigir la economía. Nada de eso ha ocurrido y cada vez que escucho al sr. Presidente, observo que, todo seguirá igual a la forma o estilo con la ha venido haciendo.
En la crisis, ha quedado en evidencia, cómo la hegemonía de esos grupos de poder, trascienden en el hacer mediador del gobierno.
Lo que observamos, falta de voluntad para acometer reformas profundas. Evade el tema de una reforma tributaria progresiva, para abordar el hueco fiscal en que nos encontramos. Mas cómodo es recurrir a préstamos, endeudando al país y a todos los panameños. El manejo de la economía y los recursos, no han generado desarrollo y con ello, aunque sea mediamente resolver las desigualdades sociales.
El poder político, no tiene capacidad de enmendar. Todo está bien. Peor se caracteriza por manejarse con un fuerte sello del yo mando y decido.
En el movimiento social popular, se percibe a un presidente que los rehúye. Seguiremos viendo más de lo mismo.
Decía el Dr. César Quintero, las comparaciones suelen incomodar, pero interesante el primer proyecto que Gustavo Petro, envió a la Asamblea, es relativo a una reforma tributaria progresiva, para resolver un hueco fiscal y con ello a darle impulso a una política de desarrollo y reparto equitativo. Igual acaba de hacer el presidente de Costa Rica, pero con otra medida dirigida a que sus ciudadanos puedan accesar a medicamentos en el exterior una libre importación simplificando el trámite. Un golpe a los oligopolios
Me sigo preguntando, por qué la rebaja no tuvo un carácter universal – solidario.
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