‘La niña del napalm’ de la icónica foto de la Guerra de Vietnam finaliza el tratamiento con láser para curar las quemaduras 50 años después
Phan Thi Kim Phuc, conocida en todo el mundo como la ‘niña del napalm’, se sometió al último tratamiento de la piel con un especialista en quemaduras en Florida, EE.UU., 50 años después de la tragedia.
Phuc tenía tan solo 9 años cuando una bomba de napalm fue lanzada contra su aldea durante la Guerra en Vietnam el 8 de junio de 1972. El momento en que la niña corría, desnuda y gritando de dolor tras haberse arrancado la ropa en llamas, fue capturado por un fotógrafo y su imagen se convirtió en un símbolo de los terrores de aquel conflicto.
«Escuché el ruido, bup-bup bup-bup, y luego, de repente, había fuego por todas partes a mi alrededor, y vi el fuego en todo mi brazo«, recordó la mujer, ahora de 59 años, citada por NBC 6 South Florida.
Esta semana, Phuc pasó por el 12.º y último curso de un procedimiento con láser al que se sometió en el Instituto de Dermatología y Láser de Miami para curar sus cicatrices y el fuerte dolor que sufrió a lo largo de cinco décadas, después de que el 65 % de su cuerpo quedara cubierto de quemaduras a causa del ataque.
Fue la doctora Jill Waibel quien se encargó de sanar el cuerpo de Phuc, eliminando y curando el tejido cicatricial. «Habitualmente todos los que tenían una lesión como la de Kim fallecían, por lo que ahora somos afortunados de poder mantener viva a la gente, pero realmente tenemos que ayudarlos a prosperar y vivir», comentó Waibel.
En Miami, Phuc, que ahora vive en la ciudad canadiense de Toronto, también se reunió con el autor de la imagen, el fotógrafo de Associated Press Nick Ut, que reside en Los Ángeles. Durante el encuentro, ambos recordaron el horrible momento en que fue tomada la imagen. «Cuando corría, vi que le ardía el brazo, que le ardía tanto el cuerpo», explicó Ut. «Después de tomarme una foto, me vio con quemaduras tan graves que dejó la cámara y me llevó al hospital más cercano», continuó Phuc.
Sin embargo, en el centro médico se resistieron a aceptar a la niña como paciente y le insistieron a Ut que la llevara a otro hospital a dos horas de camino. «Me alteré, [mostré] mi acreditación de periodista y dije: ‘Soy periodista, si ella muere, mi foto va a estar en la portada de todos los periódicos mañana’, y lo que les dije les preocupó y se la llevaron inmediatamente adentro», indicó el fotógrafo.
Phuc, que logró sobrevivir a pesar de sus heridas, lanzó un mensaje para la sociedad mundial, basado en su propia experiencia. «Deseo que todos aprendan a vivir con amor, esperanza y perdón, y si todos pueden aprender a vivir así, no necesitamos la guerra en absoluto«, concluyó la mujer.
(Tomado de RT)