La situación de crisis que estamos viviendo.     

 

Por Ramiro Guerra. Abogado y cientista político. 

No hay sorpresa, sino sorprendido. La realidad que cuenta de un creciente malestar de los panameños, era perfectamente predecible. Veníamos con un arrastre de insatisfacciones que, finalmente el problema de los precios del combustible, hizo síntesis en la ola de movilizaciones en todo el territorio nacional. Nada ocurre por casualidad; las contradicciones señaladas han propiciado un salto de calidad en la disponibilidad de masas. Lo habíamos previsto con antelación, pero los gobernantes no le dieron importancia. La realidad le ha enrostrado, que la percepción de la situación estaba muy lejos de la realidad concreta-material.

Lo he escrito con anterioridad, la forma extremadamente centralista de ejercer el poder, conduce a errores de captación de los reales procesos contradictorios que surcan la conciencia de la población y el pueblo.

Intereses ocultos y políticos como argumento para descalificar un proceso de lucha reivindicativa, como los que se vienen demandando, tiene una causalidad legítima. Que haya oportunistas, aprovechadores, y cuándo no los ha habido… Ese recurso argumentativo no es nuevo. Sale a relucir cuando de las luchas del pueblo se trata.

Lo que hoy se plantea como reivindicaciones es plenamente legítimo. Hay un serio problema relativo al excesivo costo de los alimentos, las medicinas. Hay mucho de especulación salvaje. En un ambiente de mucha precariedad, el peor enemigo del gobierno, es su proclividad a dejar hacer y dejar pasar. Los gobernantes tienen que romper con esa burbuja reaccionaria.

En reiteradas ocasiones, demandé del gobierno que expusiera al país, el plan anticíclico para enfrentar la crisis que se nos venía encima. Dejó la impresión, que no lo tenía. Y los resultados hoy están a la vista.

Diálogo, correcto, pero existe la percepción que el mismo ha sido mediatizado por la idea de que lo instrumentaliza para darle larga a la solución de los problemas.  La situación es compleja, pero la situación apunta a señalar, que el balón lo tiene el gobierno y en consecuencia las respuestas y soluciones.

DIOS BENDIGA A MI PATRIA.

4 Hay varios Likes:) Gracias...