El Periódico de Panamá Revista de Análisis Político, Económico, Social y Cultural.
Por: Geraldine Emiliani Psicóloga Clínica y Jurídica
Psicoterapeuta Familiar y de Pareja
Hoy 15 de octubre de 2021 leo la noticia que el Instituto Superior de Agricultura INA botaron a 14 estudiantes graduandos porque se fueron a chupar el fin de semana y regresaron el día lunes borrachos e irreconocibles al plantel.
Primero no hay justificación alguna para un comportamiento como el realizado por estos 14 jóvenes. Sin embargo, los jóvenes están bajo la tutela de un colegio de internado, se supone que a esa actividad de diversión debieron estar acompañados por un supervisor o inspector del plantel.
Si las autoridades, después de un encierro, soltaron a 14 jóvenes, a un lugar de festín y jolgorio donde por supuesto habrá bebidas alcohólicas, entonces ¿de qué se quejan? Ellos están bajo el cuidado del Instituto Superior de Agricultura. Entonces, ¿bajo quién recae la responsabilidad? ¿A quién hay que sancionar?
No sé si los jóvenes sean reincidentes en este tipo de conducta, no obstante, por el solo hecho de ser jóvenes y graduandos, lo que cabe aquí es una sanción con tratamiento médico psicosocial para evitar que se repita una situación como esta. Como profesional de la salud mental me parece ilógico cortarle las alas del éxito, arrebatándoles un diploma que les permita sobrevivir en un mundo de falta de oportunidades.
Opino que aquí cabría una reconsideración de parte de las autoridades del Instituto Superior de Agricultura.
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