Por: Ramiro Guerra M.
Abogado y Cientista Político.
Lo anterior me permite señalar, que el alma del periodista, siempre debe estar motivada por un hacer mediador crítico, objetivo. Más que responsabilidad con el medio en que labora, la suya es con la sociedad. Entiendo a los periodistas, que se encuentra con intereses contrapuestos; por un lado seguir líneas editoriales de los dueños de los medios para las cuales laboran y por otro lado la noticia objetiva y no de raíz enajenada.Este dilema de seguro , incómodo para los colegas periodistas. Por eso los entiendos, sobre todo cuando son empresas ligadas al poder económico, propietarias de tales medios.
No es nada fácil para un periodista, hacer o jugar el papel del malo y el bueno. Son trabajadores, que sufren una doble explotación; como trabajador y no poder tener una independencia de criterios y pensamiento. En hora buena la existencia del sindicato de periodista igual el colegio. Tienen el desafío de trabajar un mayor sentido y conciencia del papel democrático de la profesión de periodista, aún en medio de la subordinación jurídica económica en que se encuentran frente a la parte del poder económico propietarios de grandes medios. Me pregunto,¿ en esas empresas se respeta el derecho a la organización sindical? ¿ existe convención colectiva en las mismas, que regule esa labores y sus particularidades? En días pasados , el papa Francisco, imprecó al ejercicio de un periodismos, que se aleje, de lo morboso, el sencionalismo,la crónica roja y esa aberración de la post verdad. Por adelantado, mis respeto a los que ejercen la profesión de periodista. Son trabajadores igual que el resto de la clase trabajadora. En hora buena, se viene abriendo medios y periodismo alternativos. Algo positivo, trajo la era de la tecnología en comunicación.
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