El Periódico de Panamá Revista de Análisis Político, Económico, Social y Cultural.
Por: Gonzalo Delgado Quintero
Los más de 4 mil delegados escogieron un CEN totalmente declinante, sobre todo, en los puestos cimeros, hacia personas cuestionadas, incluso con casos pendientes y que por razones de influencia política los han sepultado en la Corte Suprema de Justicia, pero allí, bajo llave, en algún pupitre están. Otros que enmascaran una pésima imagen ante un supuesto posible vínculo en actividades ilícitas cuya dinámica se ha entronizado a través de la narco política como también viene sucediendo en otros partidos políticos.
Privó el clientelismo, nada absolutamente de torrijismo. Electoralismo puro y descarnado. La propia Zulay, en una grabación que llegó a mis manos, denunció la estrategia de cómo el Ejecutivo y el propio Órgano Legislativo al cual pertenece, se complotaron para “sacarle la entretela”. Ella menciona a tres personajes, uno que llegó desde la presidencia a las 10 de la noche con 200 dólares para cada una de las 500 mujeres hospedadas en un importante hotel de la localidad, donde ese otro día se llevaría a cabo las votaciones de lo que sería el XI Congreso Ordinario del PRD.
Después, sigue diciendo, llegó otro, esta vez un Alcalde de la Costa Atlántica casi siempre de vestimenta estrambótica y muy colorida, que les repartió a estas mismas delegadas 300 balboas; después, ya, a las 2:00 de la mañana llegó un emisario al buen tacto felino de gato y dio, según Zulay, 500 balboas más.
A esa altura eran 1,000 dólares para cada una de las delegadas. Se fumigaron supuestamente tan solo para sacar del ruedo a esta diputada, en un tris, en esa acción, 500 mil dólares. Interpreta la controversial diputada que los tres enviados, tanto del Ejecutivo como del Legislativo, venían con la consigna de planchar a esta controversial diputada.
Lo del CEN fue a otro nivel, inenarrable, sobre lo que no voy a gastar tiempo ni neuronas para describir; además, lo ocurrido ayer es algo que en gran medida, todos saben. Un CEN mayoritariamente influenciado por los diputados. El Ejecutivo quedó en minoría y ello provoca una serie de interrogantes. Por ejemplo: ¿qué pasará con las pretensiones presidenciales de Gabriel Carrizo?. Otra que gravita es sobre, si la composición representativa y las correlaciones de fuerza serán consecuentes con impulsar una estrategia ganadora encabezada por el PRD para el 2024.
En lo personal creo que, ahora en ese nuevo CEN, quienes lo integran, saben que un triunfo presidencial del PRD en el 2024 es muy difícil y por tanto, solo les interesa mantener su nicho electoral (circuital), su esfera de influencia y sobre todo, ser ellos, quienes tengan en sus manos la posibilidad de negociar en el futuro próximo, una posible alianza en la que no se excluye a Ricardo Martinelli. Ellos darán hasta lo prohibitivo en las personas o sea, ese punto ubicado en la parte final del órgano digestivo, con tal de mantenerse en las esferas de poder. Eso se interpreta en el evidente e impresionante esfuerzo que, sin reticencias económicas, se hizo para ganar esa importante mayoría en el Comité Ejecutivo Nacional, que una vez fue de Omar.
Unos se fortalecieron y otros se debilitaron. El desgaste natural del gobierno central es evidente. Para nada contará todo lo ocurrido en lo que va de este quinquenio. A la hora de los mameyes políticos, nadie sopesará el tema de las cargas que a cuesta ha llevado el Ejecutivo, iniciando con una muy pesada que dejó la administración Varela, sobre la deuda a proveedores por varios miles de millones y que tuvo que pagarse apenas entró el gobierno de Cortizo. Nada de eso contará, como tampoco se ponderará el tema de la pandemia y ahora, el efecto colateral de la guerra ruso-ucraniana que incrementó los precios del combustible y sus derivados.
Por su parte, se fortalecieron los diputados más beligerantes del PRD, pero esa es, si lo vemos en el contexto general, una victoria pírrica. Al final, se han profundizado las brechas que ya son zanjas en el partido que ya no es de Omar. Y aunque Benicio y Crispiano se tomaron el Partido y bajarán la línea, la realidad impone sentarse con el Ejecutivo si se pretende, al menos, terminar en paz este periodo hasta el 2024. De lo contrario, ni sus propios nichos circuitales estarán a salvo en las próximas elecciones. véanse en el espejo del Partido Panameñista.
Todo lo ocurrido ayer en el PRD, esa compra de conciencias, en esencia y por el contrario, no ayuda a resolver la situación difícil que más que arreglarse, se complica cada día, debido a reclamaciones llevadas a cabo por las fuerzas sociales que por ejemplo, en estos momentos marca un paro indefinido declarado por organizaciones políticas y sociales en la provincia de Colón.
La reflexión es para todos los panameños. No perdamos de vista el bosque por buscar el árbol. La situación social del país no está bien. Se habla de crecimiento económico, pero no se dice nada de desarrollo social, porque sobre ese tema, nada se puede decir cuando solo se han recuperado 156 mil puestos formales de trabajo de los 400 mil que se perdieron. O sea que todavía hay un impactante déficit. Además, hay una cuarta ola de Covid y la guerra de Rusia y Ucrania no observa un pronto cese; un conflicto que además del ya señalado aumento del combustible, trae consigo una inflación y una posible crisis alimentaria planetaria.
Es necesario que todos nos involucremos en construir un mejor país, de esa forma estamos ayudando a un mundo mejor; pero si continuamos con el estilo político clientelista, en este caso en nuestro partido, también y de inmediato se destruye la esperanza de los humildes a favor de los intereses mezquinos de unos cuatro gatos. La situación no es fácil.
Tengamos mayor conciencia de la situación social y política. Hagamos patria. Pensemos en las próximas generaciones y no tanto en las próximas elecciones. Actuemos de manera torrijista, no torrijera.
A los delegados, poco tengo que decirles. En primera instancia el agradecimiento a los 53 que me apoyaron, quienes de manera voluntaria me dieron el voto de confianza. Pero en términos mayoritarios, el clientelismo privó en ustedes. Primero fue eso y no pensaron en el país, ni en sus hijos y nietos, en nada altruista, sino que actuaron bajo el criterio del “qué hay pa mi”. En el biyuyo, me dijo uno, en el cariñito me dijo otro, de quienes no mencionaré sus nombres, aunque los tengo apuntados y muchos más. Otros consiguieron contratos temporales, solo eso; pero en síntesis, casi ninguno resolvió sus verdaderos problemas personales, ni de su familia o de alguien que votó por ustedes con la esperanza de conseguir algo legítimo.
Después de la borrachera de ayer, hoy es la goma. Pero pasado 15 días, algunos estarán iguales, sin plata y con los mismos problemas, se restregaran la cara y se despertarán más, volviendo a la rutina de siempre, a la realidad concreta y cuando llamen a esos mismos que les dieron dinero, serán ignorados. Habrán botado el chips del celular que solo utilizaron para atender a los delegados en este período electoral y ya.
Es una lástima, pero será así, de manera cíclica, cada 5 años, el valor del delegado terminó ayer y aunque dirán que mi escrito responde a mi enfado, en eso al menos, tienen razón, como también me asiste la razón en decirles que los de arriba están arriba y los de abajo están abajo. Pero usted es cómplice de su propia circunstancia. Estos personajes le compraron su voto y siendo ellos comerciantes de la política, ya usted recibió su paga y por tanto, no tienes nada más que reclamar.
El autor es periodista, analista y escritor.
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