Unos andan en trasatlánticos y la mayoría en cayuquitos.

Por: Ciriaco González Sánchez (Oriente Chiricano)

mientras muchos arriesgan sus vidas en cayucos, otros disfrutan de excéntricos lujos en el mismo mar de la vida.

 

Pienso que, sin ser pesimista pero tampoco ciego, la economía de nuestro Panamá va, como dicen en el argot popular: «culo pa’l barranco».

Nuestros economistas ven en el horizonte un «mínimo rebrote en el crecimiento económico».

Pero los economistas obvian decir a quienes alcanza ese «mínimo crecimiento económico».

Me parece, sin embargo, que son hasta mezquinos en el análisis al hablar de «mínimo».

Creo que, contrario a lo que argumentan, los sectores que detentan el poder económico, NUNCA han sufrido crisis económica, ni siquiera los que no viven de las importaciones, sólo salvadas excepciones.

Durante la PLANDEMIA, NINGUN industrial o comerciante dedicado al procesamiento y ventas de productos alimenticios, productos medicinales o de aseo, y otros de uso doméstico diario, sufrieron mermas, es más, vendieron hasta lo que nunca pretendieron vender; vaciaron sus bodegas hasta de productos vencidos.

Máxime si se dedican a la importación de productos generales, incluyendo comida, EN NINGUN momento los Puertos de Balboa y Cristóbal estuvieron cerrados ni mermaron sus actividades de embarque y desembarco.

La exportación desde las Mineras TAMPOCO paró nunca.

De manera, y así, a groso modo, LOS MISMOS RICOS de siempre, no dejaron de acumular ganancias, y encima, el Estado subvencionó a aquellos que SUPUESTAMENTE habían dejado de ganar, no que hubieran sufrido pérdidas.

Quienes, si sufrimos, quienes si perdimos; fuimos LOS MISMOS DE SIEMPRE: los trabajadores, los pobres, los que pasamos el vendaval COVID 19 en un cayuquito.

A nosotros nos suspendieron, nos limitaron horas de trabajo, nos obligaron a dejarnos inocular las dudosas dosis de un TME sin Registro Sanitario.

En fin, nuestros economistas se refieren es al «crecimiento económico» de quienes, sin arriesgar nada, se enriquecen importando en detrimento del DESARROLLO ECONÓMICO del país porque toda divisa vuela hacia las navieras y toda empresa transnacional, no quedando en el patrimonio nacional más que migajas.

Me atrevo a decir que, cada día vamos peor, dado el panorama actual de salarios pírricos y alto costo de la vida, DE TODO lo que necesitamos en el diario vivir.

Cuando nuestros economistas hablen de desarrollo y de crecimiento humano, que debe ser el producto del CRECIMIENTO ECONÓMICO, entonces tendrán crédito para mí.

Es mi opinión, salvo mejor criterio.

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